Un necesario llamado a la unidad
Los resultados de este gran esfuerzo están a la vista, se ganó la presidencia, varias gobernaturas, incluída la Ciudad de México, mayorías en los congresos y una cantidad importante de municipios, alcaldías y concejalías. Lo anterior fue posible gracias al motor del obradorismo sin duda alguna, pero la unidad y la organización resultaron claves; la camaradería y fraternidad necesarias, la altura de miras indispensable, y el entendimiento y dialogo algo irrenunciable. Solo así pudimos sacar del poder al neoliberalismo más rancio y podrido de las tres últimas décadas y solo así podremos mantenerlo a raya en el futuro.