En 2018, un equipo de investigadores dirigido por Alejandro Torres Montufar, responsable del Herbario de la FES Cuautitlán de la UNAM, identificó por primera vez una nueva especie de árbol en el estado de Sinaloa. Esta especie, Coutaportla lorenceana, fue confirmada como una variedad inédita de la familia de las Rubiaceae, una de las familias más grandes de plantas con flores, que incluye unas 724 especies.

Este descubrimiento se realizó en una zona restringida de la Sierra Madre Occidental, un área rica en biodiversidad y poco explorada. En un principio, los investigadores creyeron que se trataba de un ejemplar del género Chiococca, pero después de una exhaustiva investigación y una segunda visita en 2019, confirmaron que estaban ante una nueva especie. Esta variedad de árbol, que alcanza entre 2 y 4 metros de altura y posee pequeñas flores color lavanda, es única de los bosques templados de Sinaloa.

El hallazgo es significativo no solo por su aporte a la biodiversidad, sino porque la especie se encuentra en una zona de explotación maderera, lo que plantea preocupaciones sobre su conservación. Torres Montufar y su equipo han hecho un llamado a la comunidad científica y local para proteger la región y preservar esta valiosa especie antes de que desaparezca.

La nueva especie lleva el epíteto lorenceana en honor al botánico David Lorence, quien ha realizado importantes contribuciones al estudio de las Rubiaceae mexicanas. El estudio no solo enriquece el conocimiento sobre la flora de México, sino que abre puertas a nuevas investigaciones en áreas como la Química, ya que los compuestos presentes en plantas recién descubiertas pueden tener aplicaciones farmacéuticas y medicinales.

Coutaportla lorenceana es un ejemplo de cómo la exploración científica continúa revelando las maravillas ocultas de la biodiversidad mexicana y destaca la importancia de los esfuerzos de conservación en zonas de alta fragilidad ambiental.

Información: La Transformación / UNAM / Fotos: Cortesía UNAM.