Madrid. Las inundaciones y riadas en el sureste de España, que han dejado más de 150 fallecidos, han generado fuertes cuestionamientos sobre la preparación y respuesta de las autoridades ante este desastre. La provincia de Valencia, junto con Albacete y Cuenca, han sido las más afectadas, donde ríos desbordados y lluvias torrenciales arrasaron autos, derrumbaron puentes e inundaron calles y campos, desencadenando una de las mayores tragedias naturales en la historia reciente del país.
Residentes de las zonas afectadas, a través de redes sociales y medios locales, han denunciado que la alerta de Protección Civil llegó tarde, cuando muchos ya estaban atrapados en edificios y vehículos. Barbara Jiménez, trabajadora de un restaurante en Valencia, contó a Televisión Española que su jefe no le permitió irse porque no veía la situación como grave hasta recibir la alerta en su teléfono a las 20:00 horas, cuando ya era demasiado tarde y el agua había bloqueado las carreteras.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) alertó desde el jueves 24 sobre la llegada de una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), el fenómeno que causó las intensas precipitaciones. Sin embargo, la falta de una transmisión rápida y efectiva de las alertas, especialmente en los teléfonos móviles, ha sido motivo de críticas. El climatólogo Jorge Olcina señaló que, a pesar del aviso meteorológico, “la información a la sociedad no se dio con la celeridad necesaria.”
Además, Olcina advirtió sobre problemas estructurales en la región mediterránea, donde el crecimiento urbano descontrolado en zonas inundables ha dejado a muchas áreas vulnerables a desastres como este. Añadió que, debido al cambio climático, el Mediterráneo ha experimentado un aumento en la temperatura del agua, lo que genera nubes más densas y lluvias intensas durante los meses de septiembre y octubre.
El gobierno de España, encabezado por Pedro Sánchez, ha declarado la zona como catastrófica y movilizó a la Unidad Militar de Emergencias (UME) para asistir en las labores de rescate y recuperación.
Fuente: Redacción La Transformación / Foto: Cortesía.