Ciudad de México — La presidenta Claudia Sheinbaum reveló este jueves un ambicioso plan de inversión que supera los 20 mil millones de dólares, resultado de un encuentro clave con líderes empresariales de Estados Unidos, México y Canadá. La reunión, celebrada en Palacio Nacional, reunió a representantes de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y el Consejo Mexicano de Negocios (CMN), así como a diversas cámaras empresariales, con el objetivo de fortalecer los lazos comerciales entre las naciones norteamericanas.
Sheinbaum destacó que estas inversiones se centran en cuatro grandes proyectos que impulsarán sectores estratégicos para el desarrollo del país, con la participación de empresas de renombre como Woodside Energy, Amazon, Royal Caribbean y Mexico Pacific. “Este diálogo ha sido extremadamente productivo”, afirmó la mandataria, subrayando que las mesas de trabajo establecidas no solo abordaron temas económicos, sino también discusiones sobre las reformas judicial y eléctrica que su administración impulsa.
Energía y reformas: una prioridad para México
Uno de los puntos más destacados fue el enfoque en la inversión en el sector energético, donde Sheinbaum aseguró que la reforma constitucional propuesta busca fortalecer a las empresas públicas, como Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sin excluir la participación privada. Explicó que mientras el 54% de las inversiones en energía seguirán siendo públicas, el 46% estará abierto a capital privado, principalmente enfocado en energías renovables, alineando el país con las tendencias globales hacia una mayor sostenibilidad energética.
“La estabilidad del sector eléctrico y la transparencia en el sistema judicial son aspectos fundamentales para generar confianza entre los inversionistas”, apuntó Sheinbaum. Aseguró que las reformas no suponen un obstáculo para la inversión, sino que, por el contrario, fortalecerán el Estado de derecho y las instituciones del país, haciéndolo más atractivo para los negocios internacionales.
Relaciones comerciales en Norteamérica y más allá
En cuanto al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la presidenta subrayó que México se prepara para su renegociación bajo la premisa de que las economías de los tres países no compiten, sino que se complementan. Sheinbaum insistió en que el acuerdo comercial actual funciona eficazmente como una plataforma de integración económica regional que podría expandirse en el futuro a todo el continente americano.
Ante preguntas sobre la influencia de productos chinos en la región, Sheinbaum aclaró que, si bien hay una participación de componentes asiáticos en la industria automotriz mexicana, esta es marginal en comparación con la producción local y norteamericana. “No se trata de limitar la relación comercial con Asia, sino de fortalecer nuestras cadenas productivas y la complementariedad dentro de la región”, dijo, enfatizando el enfoque del gobierno en impulsar la competitividad regional.
Reforma judicial: una transformación sin control
Finalmente, al ser cuestionada sobre la reforma judicial que impulsa su gobierno, Sheinbaum desmintió las afirmaciones de que busca controlar el Poder Judicial. “Si quisiéramos controlarlo, habríamos hecho una reforma como la de 1994, eligiendo nuevos ministros”, afirmó tajantemente. En cambio, la presidenta defendió que el objetivo es erradicar la corrupción en el sistema judicial, asegurando que funcione de manera equitativa tanto para los ciudadanos de a pie como para los inversionistas, promoviendo un entorno de certeza y justicia.
“La reforma busca devolver la confianza en el Poder Judicial, haciéndolo más democrático y libre de corrupción”, concluyó.
Con la implementación de estas inversiones y reformas, México busca consolidarse como un polo de desarrollo económico y justicia, reforzando su posición en el escenario global mientras mira hacia un futuro más sostenible y equitativo.
Información: Redacción / Fotos: Cortesía Presidencia
