El pintor Fernando Aceves Humana transforma la luz, con su cromática paleta, en coloridas obras que traducen al lenguaje plástico paisajes, monumentos arqueológicos, ofrendas y esculturas prehispánicas. El artista traslada al espectador al efímero momento de la contemplación del patrimonio cultural edificado, a los horizontes que albergaron culturas ancestrales y al instante fugaz del hallazgo arqueológico.
Esta labor pictórica se conjunta en la exposición Ofrendas ocultas, que se exhibe en el Centro Cultural San Pablo, en la ciudad de Oaxaca. La muestra está conformada por 43 piezas, 42 óleos y una litografía, que plasman una serie de paisajes en gran formato, así como una selección de cuadros realizados en diversos contextos y campañas arqueológicas de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), de las que él ha sido parte.
Aceves Humana comparte que suele trabajar en zonas arqueológicas y sitios naturales, donde siempre lleva su taller en la mochila, para pintar los entornos a cielo abierto, captando la atmósfera, el contexto y la luz del instante: “Busco la experiencia de plasmar al óleo el ambiente único de los espacios rituales de las civilizaciones precolombinas”.
Explica que, en estas exploraciones a lugares de acceso difícil, es asesorado por los arqueólogos del INAH, a quienes, junto con los equipos de investigadores, agradece haberle permitido pintar los hallazgos en las excavaciones y el entorno, mientras indaga, con su oficio, el contexto del lugar, para ofrecer al tiempo el testimonio de un instante trascendente de la arqueología mexicana.
“Dado que los mitos nacen del influjo del entorno y de la morfología del territorio, procuro pintar en sitios naturales que antaño fueron venerados, o incluso, que aún reciben peregrinos, para realizar una serie de paisajes naturales que inspiraron la creación de las deidades prehispánicas”, destaca.
Entre los proyectos arqueológicos del INAH en los que ha participado el artista, están los de Monte Albán y Atzompa, donde pintó intermitentemente, de 2007 al 2020, periodo al que recuerda con gratitud, ya que tuvo la oportunidad de ser parte de la excavación –en 2011– que dio luz a la Tumba Zapoteca del Señor 8 Temblor y la Señora Agua, en Atzompa.
De 2009 a 2019, en las excavaciones del Proyecto Templo Mayor, a cargo del arqueólogo Leonardo López Luján, convivió con su equipo y admiró la multitud de ofrendas depositadas por los mexicas al pie de la pirámide del recinto sagrado de México-Tenochtitlan.
Asimismo, estuvo presente en la expedición de 2019, dirigida por el arqueólogo Guillermo de Anda, al interior de la cueva de Balamkú, en Yucatán, espacio sellado durante 1,000 años, donde se hallaron ofrendas de cerámicas e incenciarios de estilo tolteca, consagrados a Tláloc. Finalmente, de 2019 al 2020, trabajó al interior de la excavación en el Huei Tzompantli, de la antigua capital mexica, labor a cargo del arqueólogo Raúl Barrera Rodríguez, director del Programa de Arqueología Urbana (PAU).
Fernando Aceves Humana, nacido en la Ciudad de México en 1969, estudió en la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y se especializó en grabado en la Academia de Bellas Artes de Roma, Italia. Fue seleccionado a la beca Jóvenes Creadores y al Sistema Nacional de Creadores del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales antes Fonca. También, obtuvo la beca de Excelencia Artística en París, Francia.
El artista ha expuesto en México, Senegal, Suiza, Italia, España, Francia, Alemania, Inglaterra, Vietnam, Tailandia y Camboya. Su obra forma parte de colecciones de museos en México y el extranjero.
La exposición se exhibirá hasta el mes de octubre de 2022, en el recinto cultural ubicado en la calle Hidalgo número 907, en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca.
Fuente: INAH / Foto: Cortesía
